En un alarde de normalidad sin precedentes, Jude Law ha confesado que a pesar de su fama internacional él sigue usando el transporte público así, sin anestesia. “He tratado de crear unas rutinas que nos funcionan a mí y a mi familia. Disfruto mucho de las cosas normales de la vida junto a mis hijos [tiene tres]. Cogemos trenes y autobuses y es la mejor manera de desplazarse casi siempre”, afirma el actor, que opina que “si te construyes una burbuja alrededor estás buscándote problemas”.
Luego se descuelga diciendo que trata de preservar su vida privada para seguir en esa ‘onda de normalidad’ todo lo posible. “Detesto la palabra ‘celebritie’; jamás invito a nadie a mi casa ni hablo con la prensa a no ser que sea con motivo de algún trabajo que esté haciendo”. Es de suponer que ‘The Observer’ no se haya inventado estas declaraciones que no tienen pinta de ser muy profesionales. En resumidas cuentas, lo más normal del mundo.
Fuente: enelbrasero.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario